Ayuso critica la «tiranía» de la izquierda: «Porros sí, pero que un niño no se tome un bollo»

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha augurado este domingo que la izquierda mostrará «su peor cara» cuando llegue el «debate de las drogas». Ayuso se ha referido así a la propuesta presentada por el diputado de Más Madrid en la Asamblea Jorge Moruno, que insta al Gobierno regional a regular el consumo de cannabis en adultos. En concreto, la iniciativa reclama «la realización de un estudio del impacto económico, sociosanitario y criminológico que tendría la regulación del cannabis en la región madrileña».

«Porros sí, pero que no se tome un niño un bollo y que no consuma carne un ciudadano (…) Ese es el mensaje que está lanzando y sobre todo a los jóvenes», ha reprochado Ayuso en un encuentro en Alcobendas dentro de su campaña para el congreso del PP de Madrid.

La propuesta de Más Madrid insta además al Gobierno de España a llevar a cabo una regulación responsable en adultos con la finalidad de combatir el mercado negro, proteger a los menores, garantizar la salud pública mediante estándares de calidad certificados, y crear una legislación específica de regulación bajo criterios laborales, de género, territoriales, sociales y de sostenibilidad.

Según Ayuso, no hay «nada más tirano» que «perder la autonomía como personas» y ha ironizado con que el mensaje que se estaría lanzando es «pon tu vida en manos de otra sustancia, persona, Estado». «Ese debate lo vamos a dar», ha advertido.

Recientemente, el Ministerio de Sanidad se vio obligado a retirar una guía en la que recomendaba a los establecimientos de hostelería que no incluyesen bebidas alcohólicas en sus menús.

En su propuesta -recogida en la nueva Estrategia en Salud Cardiovascular del sistema sanitario español- Sanidad proponía colaborar con bares y restaurantes «para promover la dieta mediterránea como modelo de alimentación cardiosaludable, sin incluir en ella el consumo de alcohol».

Ayuso fue una de las voces más críticas contra este planteamiento: «Un buen vino como el que los señores del Gobierno nos quieren prohibir», escribió en sus redes sociales, acompañando el mensaje con la fotografía de una copa de vino.

Otra de las polémicas más sonoras fue la crítica de Alberto Garzón a la producción de carne española. Las afirmaciones del ministro se publicaron en una entrevista en The Guardian, donde arremetió contra las «macrogranjas» que «encuentran un pueblo en una parte despoblada de España y ponen 4.000, o 5.000, o 10.000 cabezas de ganado. Contaminan el suelo, contaminan el agua y luego exportan esta carne de mala calidad de estos animales maltratados».